Sin palabras

 En ocasiones no queda más que decir. Se dijo, no sirvió, ni siquiera se escuchó. No quedan palabras, no tienen sentido, ya no caben, no hay lugar. 

Y te vas, sin hacer ruido. Te alejas en silencio. No carece de importancia, el dolor es el mismo, pero no quedan ganas, solo cansancio. 

Porque hubo otras luchas desgarradoras antes, que te enseñaron, a cuidarte y respetarte. Asimilaste, el dónde no, el dónde sí y el dónde nunca, más. 

Dices adiós, sin rencor, sin una sola palabra. 

Mañana encontrarás, con quién sí, con quién siempre. 



Foto: Anastasiia Chaikovska. 


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